La noto rara, extremadamente tranquila, calmada, como si las pilas se le estuvieran acabando... Espero que no sea así, que tan sólo haya decidido tomarse la vida con un poco de calma, que se haya dado cuenta de que sus nervios sólo la llevan a una mala experiencia.
Las cosas han dado uin giro de 180 grados en un espacio de tiempo muy corto. Ha sido muy difícil asimilarlo, la verdad es que todavía no lo hemos hecho, pero ella ha asumido el peso de la situación, y tanta carga le ha provocado lesiones, sobre todo en el alma. Necesita paz, sentirse bien consigo misma y liberarse de ciertas presiones.
Quiero ayudarla, pero ¿cómo? Ojalá pudiera cambiarme por ella, asumir parte de sus responsabilidades, darle la libertad emocional que tanto ansía. Ojalá fuera omnipotente y pudiera hacerla feliz. Sólo puedo darle mi apoyo, estar ahí cuando quiere hablar y también cuando grita. Ser neutra en las circunstancias y tratar de aportar luz a la oscuridad. ¿Será suficiente? Creo que no.
Pero el tiempo pasa, y todo lo cura. No se puede vivir mal eternamente. Es cosa de esperar... No quiero esperar mucho.
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