Internet es una gran fuente de información. No estoy descubriendo el mundo con esta afirmación. Lo sé. Siempre he usado internet para buscar información, hablar con mis amigos, estar al tanto de la actualidad... Pero esta mañana, por casulidad, leyendo una noticia, se me ha venido toda mi infancia a la mente. Cientos de recuerdos me han invadido. Todo por cula de una imagen, de una simple imagen. Ésta.
Ya os he hablado de mi abuela, la mejor mujer del mundo. En el salón de su casa tenía colgado un cuadro con esta imagen. Me pasaba horas mirándola, intentando comprenderla. ¿Qué son esas cosas azules?, me preguntaba. Y esta mañana he encontrado esta imagen dentro de una noticia que hacía referencia a la reconversión industrial.
No me acordaba. No la recordaba. Cuando ella se fue, el recuerdo de su casa también lo hizo. Pero esta mañana su recuerdo me ha provocado alegría aunque también mucha añoranza y pena.
Nunca pensé que aquellas horas que pasé mirando el cuadro se tradujeran en esta reflexión, que fueran a formar parte de mis recuerdos más añorados. Lo más insignificante muchas veces se vuelve protagonista. Detrás de cualquier simpleza se esconde una historia sobre la que hablar.
Ésta ha sido mi simpleza de hoy. Me gusta que mi vida esté llena de simplezas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario